En este apartado encontrarás información de utilidad para conservar tu bienestar y salud de forma integral. Recuerda que una vida saludable te permite realizar tus actividades de manera satisfactoria, con mayor energía y por tanto te puede garantizar el éxito.
En esta ocasión te ofrecemos información acerca de la importancia del sueño; un espacio no sólo de confort sino de gran importancia para que las funciones de nuestro cuerpo se realicen de manera óptima.
Un buen sueño está ligado naturalmente a una buena calidad de vida, y su contraparte puede resultar en problemas físicos como obesidad, diabetes, depresión, alta presión sanguínea, etc.
Y es que dormir es un hecho biológico necesario que se ha visto perjudicado por premisas culturales como la asociación del trabajo excesivo y el éxito, así como la invención de la electricidad (y ahora del internet) para mantenernos despiertos durante más tiempo en la oscuridad.
No obstante, sin las suficientes horas de sueño, tanto el cuerpo como la mente no son capaces de regenerar y renovar células, quemar calorías y descansar de todas las actividades de la vigilia; ya que, como recordaremos, con esta actividad pasiva el cuerpo genera energía que nos protege de virus y gérmenes que perjudican a nuestra salud integral.
Desgraciadamente, las horas de sueño perdidas son difíciles de recuperar después, sin importar cuántas horas duermas al día siguiente, no podrás retroceder el daño al cuerpo. En especial cuando se trata del aspecto cognitivo. Y es que, el buen dormir juega un papel importante en la consolidación de las memorias
¿Qué función tiene el sueño?
El sueño es esencial para la vida y es la base de numerosas funciones fisiológicas y psicológicas, como la reparación de los tejidos, el crecimiento, la consolidación de la memoria y el aprendizaje.
¿Influye la falta de sueño en la salud?
La privación de sueño está relacionada con diversos cambios adversos de la actividad metabólica: aumentan los niveles de cortisol (una hormona implicada en la respuesta al estrés) en sangre, la respuesta inmune se ve afectada, disminuye la capacidad del organismo de procesar glucosa y el control del apetito se altera.
Una duración reducida del sueño se asoció a cambios en las hormonas que controlan el hambre; por ejemplo, los niveles de leptina (reductora del apetito) eran bajos, mientras que los niveles de grelina (estimulante del apetito) eran altos, indican que la falta de sueño puede desempeñar un papel en el aumento de la prevalencia de la diabetes y la obesidad.
Consecuencias de no dormir bien.
La falta de concentración es el principal efecto que se produce cuando se ha dormido poco, al estar en este estado de “atontamiento”, tu humor también se va a ver afectado, puedes tener más problemas de ámbito laboral o familiar, ya que te vuelves más irritable, la falta de sueño también provoca que tu organismo se vuelva más indefenso contra las enfermedades y las alergias, disminuyendo la labor de tus defensas, el trabajo nocturno incrementa el riesgo en mujeres de contraer cáncer de mama. Esto sucede ya que el cuerpo interrumpe la producción de melatonina, este antioxidante capaz de reducir el nivel de estrógeno.